El Capitalismo y los Recortes

Un sistema en crisis

Incluso la clase dirigente admite que el capitalismo está en crisis profunda. Su burbuja especulativa se ha estallado y las consecuencias de su crisis son evidentes para todos. No puede ocultarnos el hecho de que la clase obrera por todos lados tendrá que pagar durante años con el fin de sacar el orden capitalista del agujero en el que ya está

La inseguridad laboral, los despidos, los recortes en las prestaciones sociales, el desempleo juvenil en espiral, subidas de impuestos para los pobres y los jubilados, así como recortes de pensiones y bienestar para todos. No importa dónde usted viva en el llamado mundo "avanzado" capitalista, la receta es la misma. Estamos viviendo - y hasta la clase dirigente admite que lo peor está por venir - un deterioro brutal de nuestras condiciones de vida y trabajo. Se va a durar años si lo permitimos.

Mientras tanto, la gran coalición de todos los que nos explotan poco a poco restaura sus saldos bancarios, los precios de las propiedades para los muy ricos van en aumento y, naturalmente, se están votando recortes de impuestos, ya que son los merecedores "creadores de riqueza" y filántropos de la sociedad. Para ellos "la recesión" ha terminado.

Pero la crisis está lejos de terminar. Esto no es sólo una crisis de deudas incobrables o de bancos malos. Esta es una crisis estructural que ha estado con nosotros durante décadas (desde el fin del sistema de Bretton Woods en 1971, de hecho). El capitalismo está al final de uno de sus ciclos de acumulación y sólo puede salir del desastre por una devaluación de los valores de capital existentes. En los primeros tiempos del capitalismo, la quiebra por aquí o allá podría proveer una solución. Los capitalistas exitosos compraban la propiedad de los perdedores a precios muy bajos y el sistema podría empezar de nuevo. A pesar de la reestructuración industrial que se ocurrió en la década de 1980 y la manera fácil hoy en día por la que el capital cierra las empresas tan pronto como no sean rentables, la masa de capital en el mundo de hoy es tan grande que sólo una devaluación gigantesca de capital real (que no sólo estalla el globo del capital financiero ficticio) podría permitir que el capitalismo entero vuelva al "crecimiento saludable". Desafortunadamente hoy en día una devaluación así requiere la destrucción masiva que sólo puede lograrse mediante la destrucción física de una guerra global. A pesar de que las condiciones políticas y diplomáticas aún no existen para esa guerra, en última instancia, ésa es la "solución final" del capitalismo. Mientras tanto, la clase obrera mundial va a pagar un precio aún más alto que el que ya ha pagado

La clase obrera

La única fuerza que puede acabar con la crisis y evitar la guerra es el poder colectivo de la clase obrera internacional. Para las últimas tres décadas la clase obrera internacional ha estado en retirada. Se ha convertido en nada más que una pieza de capital variable que ha visto reducida su cuota mundial de la riqueza global. Con el envío de trabajos hasta el Lejano Oriente, donde las condiciones de explotación intensa son la norma, los trabajadores de los centros tradicionales del capitalismo han sido desplazados de la producción y poco a poco se ven obligados a aceptar salarios más bajos y peores condiciones laborales. Además la clase obrera se ha vuelto menos organizada y menos coherente, y la clase capitalista lo ha aprovechado.

Ahora sin embargo la situación está empezando a cambiarse. La clase trabajadora - todas las personas que dependen de los salarios para ganarse la vida - está bajo un ataque concertado sin precedentes. Hasta el momento, por las razones ya señaladas anteriormente, los trabajadores han tardado en reaccionar.

Sin embargo, algo se despierta. Desde la primavera árabe al movimiento “Ocupar” es evidente que la crisis en sí está provocando respuestas que van más allá de los límites de estas experiencias y esto ha aumentado la confianza de algunos sectores de la clase obrera. En los países más afectados, como Grecia y España, la resistencia está comenzando a aparecer. Aun así, en relación con el desastre inminente para la clase trabajadora, ha sido insuficiente. Hay varias razones por esto. Los años de la derrota se han hecho sentir, bajando la confianza de la clase obrera en sí misma. Sin embargo, esto no es sólo una cuestión de confianza. Muchos trabajadores se han dejado convencer por el individualismo capitalista y están a la espera de que de alguna manera lo peor de la crisis no se les vendrá encima. Sin embargo, los golpeará y cuando se ocurra los trabajadores tendrán que responder de dos maneras.

Lo que tendrá que hacerse

En primer lugar tendrán que unirse no importa su edad, su situación laboral, o el comercio. La forma de esta unidad tendrá que ser a través de organismos autónomos, tales como comités de huelga controlados sólo por las reuniones masivas de todos los participantes en el movimiento. Estos tendrán que ir más allá de los sindicatos y los partidos políticos capitalistas que buscan negociaciones con el orden existente.

En segundo lugar, tendrán que reconocer que la lucha tiene que ser política. Hasta ahora, muchos han llegado a reconocer la necesidad del "anticapitalismo", pero esto significa cosas diferentes para personas diferentes. Algunos piensan que simplemente significa estar en contra de los negocios grandes o una lucha contra los bancos, como si los pequeños explotadores capitalistas fuesen más bonitos. Otros piensan que significa utilizar el estado para nacionalizar todo lo posible para que el sistema siga funcionando. La suerte de los trabajadores bajo la antigua Unión Soviética muestra los límites de esa visión.

No hay posición intermedia. Si el anti-capitalismo tiene algún significado real tiene que tratarse de otra manera de producir cosas. La única opción es un sistema que suprime el dinero, la explotación, las ganancias. De hecho necesitamos una sociedad completamente diferente que produzca para satisfacer las necesidades humanas, una sociedad en la que los medios para producir y distribuir se socialicen, no manejados por un puñado de capitalistas (ya sean de la variedad privada o estatal). Se trata de una sociedad en la que el medio ambiente no sea saqueado y devastado (de una manera casi irreversible), pero respetado por las generaciones presentes y futuras. Es un sistema basado en el hecho de que todos tienen voz a través de delegados elegidos y revocables de los órganos de coordinación de toda la población. Para conseguir esto se requiere el derrocamiento del Estado capitalista democrático en el que el Parlamento actúa como una hoja de parra para la dominación de la clase capitalista y la toma del poder por el proletariado. Su objetivo será establecer una sociedad de "productores libremente asociados" que planea para satisfacer las necesidades sin fines de lucro. No habrá naciones, estados, fronteras, guerras.

Este es el tipo de comunismo que prevemos. No se producirá de la noche a la mañana. Tenemos una lucha larga por delante de nosotros, tanto para convencer a nuestros compañeros de clase de la alternativa real al capitalismo y para organizarnos para derrotar a las camarillas gobernantes capitalistas. Mientras tanto, los que ya pueden ver la necesidad de una nueva sociedad tendrán que unirse en una minoría comunista, un partido revolucionario internacional. Esta no es una cuestión de querer crear un instrumento de dominación, un gobierno en la espera, o incluso otro proyecto parlamentario. Lo que necesitamos es una organización internacional e internacionalista capaz de participar en el movimiento de la clase, de debatir, de iluminar la perspectiva para la superación del capitalismo y otra manera de vivir juntos: una asociación de personas libres e iguales, donde el "desarrollo libre de cada uno es la condición para el desarrollo libre de todos "

La Tendencia Comunista Internacionalista no es "el Partido", ni siquiera es el centro único de dicha organización. Sin embargo, nos hemos dado el objetivo de trabajar conjuntamente con activistas serios de la clase obrera y revolucionarios para impulsar la construcción de una nueva organización internacional revolucionaria. Invitamos a todos los que pueden identificarse con este punto de vista a ponerse en contacto con nosotros y entrar en la discusión.

Declaración de la Tendencia Comunista Internacionalista – Primer Día de Mayo 2012

Thursday, May 3, 2012